Excursión a la peña cortada

Te cuento como fue la excursión que hicimos otro día a la Peña Cortada porque estoy seguro de que te gustará si decides hacerla algún día. Es una excursión bastante fácil ya que en dos horas haces la ida y vuelta tranquilamente y lo único díficil es media hora de subida (un poco empinada a momentos, eso si)

En nuestro caso la excursión la empezamos desde Calles. Fuimos en coche hasta la Ermita de Santa Quiteria donde aparcamos y vimos el primer cartel para iniciar la ruta. 

El comienzo de la ruta me pareció un poco flojo. Tampoco teníamos muy claro como iba ser la excursión y teníamos la incertidumbre de realizar una ruta que sólo habíamos visto en internet pero que no sabíamos realmente como sería hasta que no llegaras allí ya que no teníamos referencias directas sobre la excursión... pero bueno, una vez que empiezas a subir es cuando empieza a mejorar, más o menos a los 15 min. de empezar. 

Al poco llegas a una especie de barranco donde la vegetación se hace más espesa y tienes dos montañas a los lados mejora bastante el camino. Ayuda mucho el rio por el que vas andando durante un rato hasta que lo cruzas por un puente de madera. Esta es una de las zonas muy bonitas donde pararte a hacer unas fotos antes de empezar la parte de la subida más dura. 

Luego tienes que continuar el camino subiendo la montaña hasta que llegas al primer mirador desde donde ya ves la peña cortada y eso te anima a seguir para llegar cuanto antes. Es un buen momento para recuperar el aliento un instante y disfrutar de las vistas del barranco. 

Vista desde el primer mirador del ascenso a la montaña

Cartel explicativo situado en el mirador

Vista de la Peña Cortada desde el mirador

Despues de esto solo queda seguir subiendo la montaña por las indicaciones de la ruta aunque nosotros llegamos a un punto que nos equivocamos y subimos por donde no era... pero lo normal es no equivocarse ya que está perfectamente indicado y enseguida encontramos el camino correcto. 

En poco tiempo llegas al segundo mirador del camino que es donde comimos al volver. El lugar es muy bonito con muchos sitios donde poder descansar, sentarte y disfrutar de las vistas y del bocadillo (si te lo has llevado).

Vista de la montaña desde el segundo mirador

Una vez que pasas el segundo mirador es cuando ves lo mejor de la excursión, llegas a la entrada de la cueva y realmente impresiona. Ves la entrada a la cueva excavada en la roca.

 Cueva con la Peña cortada al fondo

Cuando llegamos al paso de las cuevas excavadas había mucha agua ya que había llovido el día de antes. Así que nos mojamos bastante los pies pero merecia la pena porque el paso es impresionante. Pensar que los romanos cavaron ese paso a través de la roca nos parecia una pasada y las vistas que tienes en los huecos que quedan a modo de ventana son espectaculares aunque no se si en su momento lo hicieron intencionadamente o fue por casualidad. 

Vistas de la montaña desde la cueva

Por cierto, en algún sitio leí que para pasar ese tramo venía muy bien una linterna aunque si vas un día soleado antes del atardecer te aseguro que no hace falta... lo digo por experiencia.   

Cuando sales de las cuevas, llegas a la Peña Cortada que es bastante impresionante por la altura que tiene. Antes de hacer la excursión leí un comentario de alguien que había hecho la excursion y que se preguntaba qué por qué en ese tramo habían cortado toda la roca en lugar de seguir con la cueva. A mi me pareció que habían intentado seguir con la cueva pero que ahi se les derrumbó ese trozo... pero vamos, es una apreciación personal.

Una vez que cruzas la peña cortada aparece ante tí el acueducto. Cuando lo ves no te da la sensación real de lo impresionante que es hasta que no lo cruzas y lo ves desde el otro lado. Ahí es donde puedes apreciar realmente la altura del acueducto que junto con la montaña que acabas de pasar al fondo te muestra el conjunto con una armonia realmente 

Ha sido una de las excursiones que hemos hecho que más nos ha gustado por las cuevas y el acueducto aunque hay muchas excursiones que la superan por las vistas y el entorno por el que discurren. La excursión duró dos horas ida y vuelta y sobre todo hay cuatro sitios que me cautivaron, el cruce del rio, el mirador, el paso de las cuevas y el acueducto.

Una vez que llegamos a este punto decidimos volver por el mismo camino haciendo el recorrido a la inversa. Espero que os animeis a hacer esta excursión porque merece la pena.

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